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¿ACASO UN CIEGO PUEDE GUIAR A OTRO CIEGO?

Puede un ciego guiar a otro ciego

Despierta tus sentidos y encontrarás a Dios en la sencillez de la vida misma.

Esta pintura llamada 'La parábola de los ciegos' es una obra maestra del renacimiento pintada en 1568 por Pieter Bruegel el viejo, en ella se ve una cadena de hombres invidentes que caminan hacia algún lugar, al parecer van por el camino más complicado y se ven en dificultades porque el hombre que va de primeras cae a un hoyo.

Los seres humanos tenemos cinco sentidos, pero centramos la mayor parte de nuestras experiencias en el sentido de la vista y eso hace que cada experiencia sea reducida, nos perdemos del 80 por ciento de lo que podríamos percibir, es por eso que la ceguera selectiva nos puede ayudar a reconocer nuevas cosas de nuestra vida, te invito hoy a potenciar más los otros sentidos, Jesús habla en la parábola de los ciegos sobre personas que no ven, pero leyendo los signos de los tiempos hoy Jesús hablaría de personas que no quieren oír su interior, oír a Dios, oír a los demás, de personas que no quieren palpar la realidad, que no quieren gustar de la vida, que no quieren sentir aromas.

El primer ciego cayó y la pintura denota que los demás también caerán, eso parece malo, pero en realidad es lo que vivimos día a día y sería perfecto si aprovechamos la caída como parte de la experiencia de vivir; claramente un ciego no puede guiar a otro ciego, pero juntos pueden aprender a vivir si se se permiten aprender de la experiencia, la caída nos permite sentir, nos permite ser mejores, nos permite saber a qué decir que sí y a qué decir que no, nos enseña a tomar decisiones más consientes, a seguir de una manera más madura el camino de Jesús.

Despierta tus sentidos, escucha, palpa, gusta, percibe los aromas de la vida, no te quedes adormecido por tu vista, conjúgala con los otros sentidos y obtendrás experiencias completas de la realidad que nos regaló Dios. "Parte un trozo de madera y allí estoy, levanta una piedra y allí me encontrarás" así de sencillo es experimentar a Dios, despierta tus sentidos.

La invitación de este estos días es a practicar el ayuno, abstengámonos de juzgar las cosas por la simple vista, que esa abstinencia nos lleve a profundizar en la experiencia de Dios, cada vez que te acerques a la oración en cualquier escenario, cierra tus ojos  y experiméntalo con tu sensibilidad espiritual, entra en tu interior y siente, siente el amor, la misericordia, el fuego de la presencia de Dios, que tus sentidos perciban sin explicación el movimiento de un ser superior quete ama y que quiere estar contigo siempre, permite que el corazón se encienda y que su presencia te mueva hacia el horizonte más claro. 

Autor:
Diego Alfonso Ortegón Cortés